Páginas

domingo, 22 de mayo de 2011

EL DIRIGENTE POTENTE

Nos cuesta cara nuestra identificación
A la hora de hacer las cuentas con el dolor
No podemos pagar otro cuerpo joven y lozano
Aunque del mundo nos creamos los amos.

“No quiero morir, doctor: te doy un millón
Todavía tengo que llegar a la cumbre de mi profesión
Tengo mujeres e hijos para querer
Y tú, Dios: no seas tan cruel.

Mira que no le doy más limosnas al cura
Porque yo que me muera es una locura
Y tú, Barnard, ponme un nuevo corazón
Sí, el del negro apuñalado en la estación.

Y de paso ponme en el tórax un pulmón
Sí, el del barrendero que dejó su profesión
Hazme vivir unos cuantos años más, amigo
Y tu éxito se coronará junto conmigo.

Haz tu diálisis divina y milagrosa
Y tu persona, en el planeta, será decorosa
Ponme toda la sangre del disidente del dictador
Que es sangre valiente, sangre de honor.

Y de paso, con las herramientas en las manos
Ahí está mi mujer: ponle bien las puntas de los senos
Que cuando saldré de aquí necesitaré ser fiel:
Ponle silicona y estará muy buena.

Por favor, doctor, hazme la operación
Alarga un poco más mi vida, te doy un millón
Y tú, cura, en la Iglesia, reza por mí
Porque si no, el techo en la calva se te va a caer.

Y tú, Creador que ya lo sabes todo
Sabes que todavía queda mucho en juego
Para hacer el bien a la gente como yo
Que llevan su Patria y su Bandera en el corazón.

Está en juego la Democracia de la Nación
Y hay que hacer respetar la Constitución
Que por cierto, el Cristianismo, está por encima de todo
Y conmigo al mando, lo conseguiremos poco a poco.

Nada más hay que esperar unos cuantos meses más
Para que las bolsas de pobreza desaparezcan de la ciudad
Y esto será como un paraíso terrenal
Y solamente reinará el Bienestar Social.

Así que, mi bienquerido Padre Eterno
Si me matas ahora, tendré que ir al Infierno
Para no haber cumplido a tiempo con mi deber
De salvar a la humanidad de esta plaga social.”.

Y en ese momento se le para el corazón al dirigente
Después del transplante con el del negro indigente
“Hubo un rechazo incompatible”, dicen los médicos
Y “Una gran pérdida para la humanidad”, dicen los políticos.

Y como siempre Dios no dice nada
Y el Diablo tampoco porque ya tiene otra alma regalada
Y al cura se le cae el techo de la Iglesia en la calva...
Y ya hemos visto que de la muerte nadie se salva.


XIV-VI-MCMXCIV BRIHUEGA (GU) -SPAIN




Safe Creative #1009040237802

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Pon aquí tu opinion: